Valentina creció creyendo que los cuentos de princesas eran de verdad. Pronto supo que no era así y su corazón se rompió en mil pedazos a causa de la desilusión. Se sentía desdichada, no sólo por haber perdido a su primer amor, si no por haber dejado atrás su inocencia, pues descubrió que aquello en lo que siempre había creído eran sólo cuentos. Seguir leyendo «Valentina»